El ministro de Agricultura alemán, Cem Özdemir, ha pedido a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que intervenga en la introducción de la nueva ley EU contra la deforestación, que debería entrar en vigor el 1 de enero de 2025. Según muchos importadores, exportadores y organizaciones comerciales, las nuevas normas y mecanismos de control prescritos aún no están suficientemente desarrollados.
Muchas empresas, reconocidas en el sector agrícola y forestal, todavía luchan por implementar sistemas de trazabilidad que dejen claro que sus productos no provienen de selvas deforestadas. Esto genera preocupaciones sobre la practicidad, especialmente dentro del sector agrícola, y plantea dudas sobre el impacto en el comercio internacional.
Özdemir hizo su llamado en la reunión mensual de los ministros de agricultura de los 27 países del EU. Repitió su comparación anterior de esta ley de deforestación con la (ahora cancelada) ley de pesticidas SUR, también una parte importante del Pacto Verde del ex comisario holandés Frans Timmermans. Según Özdemir (Verdes), estas propuestas no son lo suficientemente pragmáticas.
El Comisario de Agricultura, Janus Wojciechowski, ya había dicho anteriormente que Bruselas quiere respetar la fecha de implementación. Muchos países del EU dicen que los controles no probados y vacilantes muestran que la nueva ley causará muchos problemas. En el Parlamento Europeo, la fracción democristiana del PPE también está intentando posponer el proyecto de ley para poder modificarlo radicalmente. Otros partidos de Estrasburgo no están (¿todavía?) de acuerdo con esto.
Las organizaciones ambientalistas han respondido firmemente al llamado de Alemania y otros países del EU. Señalan que mayores retrasos podrían tener consecuencias desastrosas para el medio ambiente, dada la necesidad de combatir la deforestación global. Piden a la Comisión Europea que no se deje llevar por las presiones económicas y políticas, y que el EU siga desempeñando un papel protagonista en la lucha contra la deforestación
Aunque la Comisión Europea se apega a la fecha principal de implementación, se están trabajando entre bastidores posibles soluciones. Ursula von der Leyen ha indicado que está abierta a propuestas pragmáticas, pero que no se debe perder de vista el objetivo principal: detener la deforestación. La cuestión está en la agenda de la presidenta de la Comisión, Von der Leyen, porque el actual comisario de Agricultura, Wojciechowski, dimite, pero su sucesor (el luxemburgués Christophe Hansen) aún no ha sido nombrado formalmente.
El Reglamento de Deforestación EU (EUDR) está diseñado para evitar que productos como la madera, la soja, el aceite de palma, el café y el caucho, derivados de tierras deforestadas, entren en el mercado europeo. Esto se aplica no sólo a las importaciones de países que no pertenecen al EU, sino también (debido al principio de igualdad) a las importaciones y exportaciones entre los propios países del EU.