Propuesta del EU para el uso de glifosato: hasta ahora sólo Alemania se opuso

Al presentar la propuesta de la Comisión Europea para ampliar la autorización del glifosato en pesticidas, sólo Alemania dijo que estaba en contra. También se sabe que Austria está en contra del uso de glifosato en la agricultura. Francia ya no está en contra de una prohibición total, sino que ahora quiere una reducción de tres cuartas partes.

Los Países Bajos harían una reserva el viernes pasado en la reunión de expertos de SCoPAFF, como ya había informado a la Cámara de Representantes el ministro de LNV, Piet Adema. La mayoría parlamentaria ha ordenado al gabinete saliente que vote en contra, pero Adema quiere esperar primero el asesoramiento de los expertos holandeses del Comité para la Autorización de Productos Fitosanitarios y Biocidas (Ctgb).

La legislación europea estipula que el permiso para el uso de productos fitosanitarios puede ampliarse por un período máximo de 15 años. En este caso, Bruselas propone ampliar 10 años la vigencia del glifosato. En teoría, los ministros del LNV pueden optar por un período más corto.

La autorización actual expira en diciembre de este año, pero fuentes cercanas a la Comisión afirmaron que si no se alcanza una mayoría cualificada en la primera votación de octubre, la validez del herbicida se prorrogaría hasta que concluyan las deliberaciones. Esta última formulación crea el espacio administrativo para que las personas vacilantes mantengan la propuesta y, en última instancia, la lleven más allá de las elecciones europeas.

Anteriormente, dos importantes organismos asesores europeos (ECHA Chemicals y EFSA Food Safety) concluyeron en estudios adicionales que el glifosato no representa una amenaza para el medio ambiente ni para los humanos. Sin embargo, la Comisión Europea impone condiciones adicionales (nuevas) para su uso en franjas de cuatro a diez metros de ancho a lo largo de las costas. También se deben utilizar otras boquillas pulverizadoras que ofrezcan incluso menos posibilidades de que los pesticidas se dispersen.

Los países del EU tendrán que decidir sobre el futuro del glifosato por mayoría de votos el 13 de octubre.

En Francia, el presidente Macron prometió en 2017 eliminar gradualmente el glifosato “a más tardar a principios de 2021”, antes de retractarse de su promesa el año pasado. En los Países Bajos y Bélgica, el uso de glifosato está prohibido para los particulares, pero no en la agricultura y la horticultura. En Portugal está prohibido su uso en espacios públicos. En la República Checa está restringido pero no prohibido desde 2019. Alemania planea prohibir el glifosato a finales de 2023.

 En última instancia, la propuesta EU puede bloquearse por sí sola o aprobarse por mayoría cualificada. Esto significa que al menos 55% de los Estados miembros, que representan al menos 65% de la población EU, no sólo no deben abstenerse de votar, sino que también deben votar activamente a favor o en contra.

Esto no funcionó el año pasado y los propios comisarios europeos decidieron ampliar su uso durante un año, de modo que fue posible realizar estudios adicionales de la ECHA y la AFSA.