El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, ha criticado duramente al presidente ucraniano Zelensky por sus comentarios públicos sobre el canciller alemán Olaf Scholz.
Zelensky expresó recientemente su descontento por la renuencia de Scholz a suministrar misiles de crucero alemanes de largo alcance a Ucrania, una cuestión que ha estado poniendo a prueba las relaciones diplomáticas dentro de la OTAN durante algún tiempo. Las tensiones entre Ucrania y Alemania ahora amenazan con escalar, en parte debido a la solicitud urgente de Kiev de armas avanzadas.
Scholz se muestra cauteloso a la hora de suministrar los misiles de crucero Taurus porque estas armas plantean un posible riesgo de escalada. Alemania teme que su uso provoque aún más a Rusia, dado el largo alcance y la precisión de esos misiles de crucero alemanes. Scholz incluso incluyó su negativa en el manifiesto electoral de su partido SPD.
Zelensky reaccionó con frustración ante el rechazo de Scholz y criticó abiertamente la posición alemana. Según él, esta precaución está obstaculizando los esfuerzos de Ucrania para defenderse eficazmente contra la continua agresión rusa. También sugirió que Alemania tal vez no esté haciendo lo suficiente para apoyar los intereses ucranianos, lo que genera tensiones dentro de la OTAN.
Según Rutte, las críticas de Zelensky a Scholz son infundadas y contraproducentes. El jefe holandés de la OTAN señaló que Alemania ha brindado un importante apoyo, tanto financiero como militar, desde el comienzo de la invasión rusa. Destacó que dicha ayuda merece reconocimiento, más que crítica pública. "Alemania es un aliado crucial y debemos respetar sus contribuciones", dijo Rutte.
Mark Rutte, que anteriormente fue Primer Ministro de los Países Bajos, se ha pronunciado enfáticamente a favor de la unidad dentro de la alianza. Indicó que, como jefe de la OTAN, estaría dispuesto a suministrar misiles de crucero sin restricciones si estuviera en la posición de Scholz. Al mismo tiempo, subrayó que las decisiones finales sobre la ayuda militar dependen de cada país y que las divisiones públicas podrían socavar los esfuerzos conjuntos contra Rusia.
Los comentarios de Rutte demuestran los desafíos más amplios que enfrenta la OTAN para mantener la solidaridad en una situación geopolítica compleja. Mientras que algunos Estados miembros, como Polonia y los Estados bálticos, están presionando para lograr el máximo apoyo a Ucrania, otros países están adoptando un enfoque más cauteloso para evitar una mayor escalada.