La horticultura de invernadero está floreciendo y, en general, ocupa una proporción cada vez mayor del mundo, especialmente en el sur global. Esto se desprende de un nuevo estudio realizado por investigadores daneses y chinos que han mapeado la horticultura de invernadero global utilizando imágenes satelitales detalladas e inteligencia artificial.
El público europeo está acostumbrado desde hace tiempo a poder comprar tomates, pepinos, bayas y melones frescos durante todo el año. La mayoría de los países EU importan la mayor parte de España, donde se cultivan millones de toneladas de frutas y verduras en paisajes de plástico blanco que se extienden sobre vastas áreas de tierra en la parte soleada del sur del país.
Y en todo el mundo, la producción de horticultura de invernadero está aumentando, según un nuevo estudio de la Universidad de Copenhague, que ha calculado el tamaño global de la horticultura de invernadero. Sin embargo, el gran auge no está ocurriendo en Europa, sino en los países de ingresos bajos y medios del Sur Global.
Los investigadores utilizaron una combinación de algoritmos e imágenes de satélite para mapear cuánta tierra se utiliza para la horticultura de invernadero en todo el mundo. Muestra que la horticultura en invernaderos, ya sea en invernaderos o en campos abiertos cubiertos de plástico, cubre al menos 1,3 millones de hectáreas de la superficie terrestre. La nueva cifra es casi tres veces mayor que las estimaciones anteriores.
La producción hortícola de invernadero se distribuye en 119 países diferentes, de los cuales China representa nada menos que 60,4% de la superficie total. España ocupa el segundo lugar con 5.6% e Italia en tercer lugar con 4.1%. El cultivo de invernadero holandés ocupa el noveno lugar con poco menos del uno y medio por ciento.
Si bien los grandes grupos de invernaderos surgieron en el Norte Global en las décadas de 1970 y 1980, surgieron en el Sur Global veinte años después. Y si bien ahora hay cierto estancamiento en el Norte Global, el crecimiento continúa en países de Asia, África y América Central y del Sur. Hoy en día, el Sur Global emite alrededor de 2,7 veces más gases de efecto invernadero que el Norte Global.
Un factor importante que contribuye a la "paralización" de los cultivos bajo invernadero en los Países Bajos es el fuerte aumento de los precios de la energía. Desde que los países del EU decidieron dejar de comprar gas y petróleo a empresas rusas, se ha producido una reorientación de las estrategias comerciales en esa industria.