La producción de vino cae a un nuevo mínimo debido al mal tiempo

La producción mundial de vino este año será la más baja de los últimos sesenta años. La causa es el aumento de las condiciones climáticas extremas, tanto en el hemisferio sur como en el hemisferio norte. 

La Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) estima que este año se producirán 244 millones de hectolitros de vino. Esto es un 7 por ciento menos que el año pasado. También el año pasado la producción total fue inferior a la media.

El penúltimo año muy débil fue 2017, cuando la producción ascendió a 248 millones de hectolitros. El nivel más bajo fue de 214 millones de hectolitros en 1961.

En el hemisferio sur, como en Australia, Argentina, Chile, Sudáfrica y Brasil, las cosechas de uva son entre un diez y un treinta por ciento menores de lo normal.

En la Unión Europea, Italia, España y Grecia son los que más sufren el mal tiempo. Francia se convirtió este año en el mayor productor de vino del mundo.

Sólo en los Estados Unidos y Nueva Zelanda la producción superó claramente la media de los últimos cinco años. Alemania, Portugal y Rumanía también obtuvieron buenos resultados.

Además de la sequía, en varias partes del mundo los viñedos también se han visto afectados por heladas tempranas y fuertes lluvias.

La OIV afirma que no se espera escasez de vino. El consumo de vino en el mundo está disminuyendo, pero las existencias son grandes en muchas regiones, por lo que una cosecha más débil no tendrá consecuencias importantes.