Las exportaciones polacas de carne de pollo colapsan debido a la sobreproducción y la gripe aviar

En la industria avícola polaca, los precios han caído un diez por ciento en los últimos días debido al exceso de oferta. La exportación de carne de pollo ya implica pérdidas.

Dado que el primer brote de influenza aviar altamente patógena ahora también se ha confirmado oficialmente en Polonia, se esperan nuevos golpes en las exportaciones avícolas polacas.

Los precios son en promedio alrededor de 33% más bajos que el año pasado, según la Cámara Nacional Polaca de Productores de Avicultura y Piensos. . Aunque la mala situación de las aves de corral polacas está relacionada en parte con la pandemia de la corona, la propia industria polaca contribuyó a esta mala situación, según los consultores agrícolas de la embajada holandesa en Varsovia.

Después del primer brote de COVID-19 en marzo de 2020, la producción avícola se redujo en la mayoría de los países europeos, pero Polonia aumentó su producción avícola. Según datos de Eurostat, el sacrificio industrial de aves de corral en Polonia este año ya ascendió a 1761 mil toneladas, un aumento de 3.43% en comparación con el mismo período del año pasado.

Según los analistas del mercado avícola, existen amenazas aún mayores para la industria avícola en Polonia. El primer desafío se refiere al Brexit. Gran Bretaña es el segundo mayor importador de aves de corral polacas, que es casi seguro que tendrán que pagar derechos de importación el próximo año.

El segundo desafío se refiere a la prohibición continua del uso de materias primas transgénicas en la alimentación animal en Polonia. A principios de esta semana, el parlamento polaco extendió (por quinta vez) la autorización temporal para el uso de alimentos para pollos modificados genéticamente.

Además, los políticos polacos aún no se han decidido por una nueva ley de bienestar animal más estricta que acabaría en gran medida con la matanza sin aturdir. Como resultado, estas amenazas aún flotan por encima del mercado, lo que representa un riesgo significativo para el desarrollo de estrategias futuras para el sector agrícola.