El Parlamento Europeo ha endurecido aún más los nuevos proyectos de ley contra la contaminación ambiental. Los políticos del EU quieren que se cumplan al menos los criterios de salud pública de la Organización Mundial de la Salud (OMS) tanto en lo que respecta a la contaminación del agua como del aire.
Los eurodiputados adoptaron así posiciones de mayor alcance que las contenidas en dos propuestas de la Comisión Europea.
Por ejemplo, el Parlamento Europeo cree que deberían existir límites máximos para todo tipo de contaminación del agua y del suelo por productos químicos PFAS y glifosato de productos agrícolas. Recientemente se supo que once de los doce países EU estudiados contienen residuos de glifosato en las aguas subterráneas.
Las nuevas directrices para aguas subterráneas y superficiales presentadas el año pasado establecen estándares de calidad para decenas de sustancias peligrosas. El Parlamento Europeo quiere añadir las PFAS como grupo de sustancias.
La Comisión Europea también quiere una menor contaminación por glifosato, con criterios estrictos para el uso del agua potable, pero reglas menos estrictas para las aguas superficiales. El Parlamento rechaza ese enfoque y quiere que en todas partes se apliquen los criterios más estrictos posibles.
Actualmente, alrededor de 300.000 ciudadanos del EU mueren cada año por los efectos de la contaminación del aire. Ese número debe reducirse drásticamente y, para lograrlo, primero debe disminuir la contaminación del aire. Por lo tanto, el Parlamento Europeo ha determinado que para 2035 se introducirán valores límite y valores objetivo más estrictos para muchos contaminantes.
Los eurodiputados quieren unificar índices de calidad del aire fragmentados e ilógicos en todo el EU. Estos deben ser comparables, claros y disponibles públicamente. De esta manera, los ciudadanos del EU pueden protegerse en momentos en los que hay mucha contaminación del aire.
Ahora que el Parlamento Europeo ha tomado posiciones al respecto, los países del EU deben presentar su posición. Se espera que esto suceda en otoño. Entonces podrán comenzar las negociaciones finales entre el parlamento y los países del EU sobre una menor contaminación del suelo y del aire.