El presidente eslovaco se queja ante Putin del bloqueo del gas en Ucrania

Con una visita sorpresa al presidente ruso Putin, el primer ministro eslovaco Fico ha causado revuelo en la Unión Europea con su viaje a Moscú, el primero desde la invasión rusa de Ucrania y el inicio del boicot EU contra el régimen de Putin.

Sin duda, la conversación versó sobre el suministro ruso de gas natural a Eslovaquia, que probablemente finalizará la próxima semana. Ucrania deja de transportar gas ruso a través de gasoductos ucranianos a Europa occidental.

A diferencia de la vecina Hungría, Eslovaquia –que es miembro tanto de la OTAN como de la Unión Europea desde 2004– ha apoyado hasta ahora todas las sanciones contra Rusia. En marcado contraste, el presidente Fico llama repetidamente la atención por sus críticas públicas al EU y a las políticas de la OTAN en Ucrania. 

La oposición eslovaca reaccionó con indignación ante la reunión en el Kremlin. El primer ministro debería discutir en Kiev el tránsito de gas para Eslovaquia, afirmó el líder del mayor partido de la oposición. "Está traicionando a su propio país y alejándonos de Europa paso a paso".

Las visitas de importantes políticos europeos a Moscú se han vuelto raras desde el inicio de la guerra hace casi tres años. Cuando el canciller austriaco Karl Nehammer (ÖVP) se convirtió en el primer jefe de gobierno occidental en reunirse con Putin en Moscú unas semanas después del ataque a Ucrania, fue duramente criticado. La visita no autorizada del primer ministro húngaro, Viktor Orban, tampoco fue apreciada en Bruselas, pero fue menos sorprendente dados sus conocidos estrechos contactos con Moscú.

En los días previos a su reunión con Putin, Fico había intentado en vano, incluso en la cumbre del EU en Bruselas, impedir el fin del tránsito de gas ruso hacia Eslovaquia anunciado por Ucrania. Su país corre el riesgo de sufrir una grave crisis porque depende completamente del gas ruso y tiene pocas alternativas, subrayó.

Por tanto, Eslovaquia había recibido permiso del EU para seguir comprando gas ruso. Sin embargo, esta aprobación del EU es prácticamente inútil, ya que Ucrania ya no permitirá el tránsito de gas a partir de la víspera de Año Nuevo.