Los precios agrícolas en la Unión Europea han caído significativamente en el primer trimestre de 2024. Esto significa que los precios agrícolas se están acercando nuevamente a los niveles anteriores al estallido de la guerra rusa contra Ucrania. Esta caída se considera una señal positiva para la estabilidad del mercado agrícola.
Las cifras europeas de Eurostat muestran que los Países Bajos están muy por detrás de otros países del EU en el campo de la agricultura orgánica. Aunque los Países Bajos dicen que quieren estimular esta forma de producción de alimentos respetuosa con la naturaleza, allí apenas hay crecimiento. En los Países Bajos, sólo alrededor del 4 por ciento de la tierra agrícola es orgánica.
La agricultura ecológica tiene ventajas y desventajas para el clima. Al no utilizar fertilizantes artificiales, las emisiones de óxido nitroso, gas de efecto invernadero, son significativamente menores. Pero debido al control mecánico adicional de las malas hierbas, las emisiones de CO2 vuelven a ser mayores. El gas y los fertilizantes más caros conducen a una menor compra y uso.
Las nuevas cifras de Eurostat también muestran que el boicot europeo a la importación de gas ruso a partir de 2022 provocó un aumento considerable de los precios del gas y, por tanto, también un aumento considerable de los fertilizantes. Ese año se utilizaron muchos menos fertilizantes minerales en la agricultura europea.
Hubo una disminución de más del diez por ciento, con lo que el uso total ascendió a 9,8 millones de toneladas. La mayor caída se produjo en los fertilizantes fosfatados, que disminuyeron en 17,9%. En cuanto a los fertilizantes fosfatados, Francia, España, Italia y Rumania fueron los mayores consumidores, representando en conjunto aproximadamente la mitad del total de EU.
En los Países Bajos se observó una tendencia similar. El sector agrícola holandés experimentó una disminución significativa en el uso de fertilizantes nitrogenados y fosfatados en 2022. Esto fue impulsado no sólo por el aumento de los precios, sino también por regulaciones ambientales más estrictas y un creciente enfoque en la sostenibilidad.