El ex presidente del gobierno de Cataluña, Carles Puigdemont, ya no puede ingresar a los edificios del Parlamento Europeo después de que la justicia española emitiera una nueva orden de detención europea (EAW) en su contra el lunes. Según medios españoles, esta orden de detención forma parte de algún tipo de cooperación entre los Estados miembros y las instituciones europeas.
El Parlamento también impidió que algunos políticos catalanes accedieran a los edificios del EU en octubre de 2017, cuando se emitió la primera orden judicial. Tres políticos catalanes que fueron elegidos diputados al Parlamento Europeo en mayo solo pueden entrar en los edificios como 'visitantes'. Esto evita que Madrid emprenda acciones legales contra el EU.
La representante del gobierno catalán en el EU, Meritxell Serret, exigió este martes que las autoridades europeas intervengan para allanar el camino al diálogo político entre España y Cataluña.
El Tribunal Supremo de España condenó el lunes a nueve líderes políticos regionales catalanes a 13 años de prisión por incitación y uso indebido de fondos públicos por su papel en el fallido referéndum de la región de 2017 para declarar la independencia.
Actualmente, las sentencias están causando gran indignación en España. Los líderes de los separatistas catalanes pidieron a sus seguidores que salieran a las calles en masa, lo que hacen.
El ex primer ministro Carles Puigdemont, junto con otros dos políticos catalanes que huyeron, no fueron juzgados, ya que huyó a Bélgica y anteriormente se negó a extraditarlo al tribunal de Madrid. Bélgica lo hizo porque el derecho penal belga no tiene equivalente para el cargo de "rebelión". Entonces ahora hay una nueva orden de arresto. Todavía no está claro cómo responderá Bélgica a esto. El propio Puigdemont calificó la condena como “una atrocidad”.